TEORÍA: Paubla Rojas y el Biodrama en cinco pasos desde los pueblos del Sur de Mérida. Por Freddy Antonio Torres González

 Paubla Rojas y el Biodrama en cinco pasos desde los pueblos del Sur de Mérida.

(Muestra en torno al trabajo práctico de grado de Paubla para optar a la licenciatura de Actuación de la Escuela de Artes Escénicas de la Universidad de los Andes).

La Antropología social y teatral ha influenciado mucho con sus teorías de lo nuevo humano y sus experimentos prácticos porque unifica en su intento plasmar la investigación antropológica y la investigación teatral: el mito, el rito familiar, los orígenes, lo sagrado. Según Patrice Pavis, la antropología encuentra en el teatro un terreno de experimentación excepcional, puesto que coloca bajo la mirada de los hombres que juegan a representar a otros hombres.

Esta simulación permite observar como espectadores analizar y mostrar de qué forma y manera éstos se comportan en sociedad. Paubla conscientemente coloca a la familia y las costumbres en una situación experimental, el teatro y la antropología teatral proporcionan los medios para reconstruir micro sociedades y para valorar un vínculo de ella misma con el entorno familiar. La pregunta clave aquí es, ¿cómo representar mejor a un hombre que representándolo?

El punto focal ahora mismo de la antropología teatral asumida por Eugenio Barba sigue siendo la relación ritual-teatro, pero con dos variantes exclusivas. En primer lugar, el término ritual se emplea desde una condición "desacralizada" o rito de los comportamientos humanos. En segundo lugar, ¿cuál es la indagación, en sentido amplio, de las analogías estructurales entre comportamientos culturales de la familia y comportamientos escénicos, entre rituales cotidianos y rituales representativos? ¿Cuál es el fundamento del comportamiento actoral con sus características materiales, biológicas, pre-expresivas?

Creo que el objeto central común de esta línea de investigación de Paubla Rojas que se refiere a su trabajo de puesta en escena está representado por las relaciones de teatro-vida cotidiana, o más bien, comportamiento teatral/comportamiento cultural. A mí me parece que el hecho escénico de la distancia del evento propone lo teatral como extra-cotidiano.

Es posible que Paubla desde la misma práctica encontró junto a otros maestros la idea del Biodrama, búsqueda a través del arte de nuestra manera de vivir en la ética y la estética teatral, ligada a la naturaleza como la madre de los principios biológicos del actor.

Recordemos que el sueño en distintos idiomas proviene de drama, trama, tramar. Y que bios es vida... Entonces vemos que drama está vinculado al "sueño".

El sueño de la creación es un camino de rupturas de lo establecido como teatro.
Biodrama entonces es una celebración de la vida que integra todas las artes. Es una exploración y experimentación, siempre en proceso, nada acabado. Se trata de una investigación-acción creativa pedagógica que celebra la memoria. Memoria considerada como pasado-presente-futuro, donde las artes y expresiones del Ser puedan confluir en un Ser orgánico Arte y Parte de la naturaleza y el cosmos.

En el Biodrama entonces se pueden mezclar la música, la danza, el canto, la palabra,  la máscara, la imagen teatral, la oralidad, la escritura, la literatura, las artes plásticas, los oficios, los saberes milenarios, las ciencias humanas y naturales. El Biodrama es simplemente la celebración de la Naturaleza dentro de un sentido estético-ambiental .

Las escenas de los diablos danzantes de los pueblos del sur, el espejo, las velas y las fotos, la comida, el guarapo sanador, la reunión en un círculo de la imagen familiar; Paubla en un centro imaginario se muestra con los distintos ropajes desde una niña hasta la mujer del pueblo que baja a estudiar a la ciudad, los familiares y niños, la lagartija mayor de la casa, la película de su vida que nos sumerge en la cotidianidad real soñada, la ternura, el amor, la compasión, la presencia del público que acompaña a Paubla Rojas en una vida que es sueño. Todo es mostrado como rompiendo el espejo de las siete vergüenzas de la vida (orgullo, mentira, ambición, envidia, dejadez, despedida y homenaje a la NONA difunta, es parte de ese Biodrama existencial que le da vida otra vez, ante nosotros sus espectadores, ese sentido de memoria estética- sueño-vida pasada.

En ese lugar del César Rengifo se celebra el momento que vuelve a aparecer como creíble y manipulable el Biodrama de Paubla.

Observo también como cualidades del Biodrama de Paubla el planteamiento de la diversidad de opciones del género Biodrama, la utopía posible porque se atreve a re- crear una tierra prometida en los sueños donde todos cabemos y somos reconocidos en una hermandad de pueblo para que se haga realidad.

El Biodrama confronta la historia establecida del teatro, lo sabemos, porque representa la historia originaria sobre la tierra, y en ese espejo-escena teatral intenta romper y lucha a contracorriente con el sueño-realidad que ha sido el trajinar de Paubla.

Se trata de restaurar
echar un vistazo,
aquí y ahora,
aceptar que estamos en el génesis,
convocar el acto continuo
de la creación,
componer la imagen- semejanza,
el cuerpo: del actor-actriz
el verdadero hombre-mujer
que logra conjugar los tres niveles del cuerpo:
el cuerpo orgánico, el cuerpo de la mente y el cuerpo de las emociones.

También el Biodrama celebra,
el actor, el músico, el escultor,
el pintor, el danzarín como depositarios del conocimiento.
Hoy en día, la dramaturgia narra
desde lo mítico a lo sagrado.
Ahora los actores
son histriones sin vida personal
porque no muestran nada verdadero
sin romperse ni marchitarse,
actúan como muñecos mecánicos.

El Biodrama preconiza
al actor, a la actriz re-constituirse,
restaurarse, renacer-se como unidad
de todas las fuerzas del mundo
dónde desde el cuerpo todo es posible.
Él y ella, van a lograr su presencia,
de luz y sombra,
su drama será posible en la plenitud del día.
Representar la totalidad de la vida,
como recreación,
jolgorio,
ceremonia,
restituir el territorio familiar
en el Biodrama.

Freddy Antonio Torres González. Mérida, 2025.